Y cuando estaba tratando de convencer a Fran de que la única solución para formar una comunidad acuática era tomarnos un barco a oriente (eran como la dos de la mañana y caminábamos por una calle del centro) nos encontramos con una casa que parecía acuario o casa de juguete. Entramos. Adentro alguien a quien no conocíamos, que dijo que vivía como un pescado nos dio café y nos prestó calcetines. Acuarios y mares como esos: que alivio.
Sunday, March 05, 2006
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2 comments:
También había una pelota enorme, y música... ¡qué alivio!
Uffff... vaya eso de vivir como peces. En mi acuario hay más tiburones y encopetadas orcas. Y te lo dice un pez de tomo y lomo.
Saludos María, pues que dicen que he cambiado mucho, a tí si te recordaba.
Lindas fotos esas las orientales.
Saludos!
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